El debate que protagonizaron el y las candidatas al gobierno del estado de Tlaxcala no cubrió las expectativas de los electores, y es que la verdad durante casi dos horas de trasmisión se expusieron propuestas pobres, muchas sin sentido, hubo nerviosismo, se evidenció un pleno desconocimiento de lo que vive el estado en materia de salud y seguridad pública.

Aunque la opinión y el análisis incomoden, la realidad es que Lorena Cuéllar, Eréndira Jiménez, Evangelina Paredes, Viviana Barbosa, Anabel Aválos, Liliana Becerril y Carlos Sánchez quedaron a deber a los tlaxcaltecas.

Nadie aprovechó la oportunidad del primer debate obligatorio para posicionarse; digan lo que digan,  pero es un hecho que nadie se preparó al ciento por ciento para responder de una manera inteligente, contundente, acertada y realista a las preguntas de los moderadores.

La experiencia de Lorena Cuéllar y de Anabel Aválos como políticas quedó en segundo término, se perdieron en muchos de sus comentarios, se preocuparon por respetarse que en defender sus ideales y objetivos.

El análisis del debate se enfoca en que las y el aspirante a gobernar el estado de Tlaxcala desaprovecharon la oportunidad de subir en las preferencias, de marcar diferencia con el resto de sus contrincantes y de ser el referente principal para lo que falta de la campaña.

A las propuestas expuestas en este primer debate les faltó contenido, nunca explicaron los procedimientos que utilizarán para obtener los recursos y hacer de sus metas una realidad para los tlaxcaltecas, como ejemplo los hospitales y clínicas que prometieron algunas de las candidatas.

El que los aspirantes hayan leído parte de sus intervenciones les restó credibilidad y confianza, se encajonaron y se vieron nerviosos en sus respuestas e intervenciones.

Si bien se habló del interés para elevar el salario a los policías, nadie dijo porcentajes o cifras aproximadas, mucho menos hablaron del tipo de prestaciones y como mejorar las condiciones laborales de los policías y sus familias.

En términos generales las propuestas de las candidatas y el candidato son pobres en contenido, es decir que están lejos de los requerimientos de Tlaxcala.

Si bien el debate no se dio como se esperaba en la trasmisión oficial, en las redes sociales fue lo contrario simpatizantes de las abanderadas y el candidato crearon memes con insultos y descrédito al trabajo político de los participantes en este proceso.

En el mes de mayo el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) organizará un segundo debate obligatorio en el cual se espera que las y el aspirante en verdad asuman su papel de querer llegar a gobernar el estado, que expongan propuestas apegadas a la realidad, sin mentiras, que no estén fuera de lugar o inalcanzables porque los tlaxcaltecas están harto de falsas promesas, de los políticos, de los partidos y sus dirigentes.

Quien no sea contundente, serio, responsable y determinante en sus respuestas perderá la oportunidad de generar condiciones para obtener el voto de un mayor número de tlaxcaltecas el próximo 6 de junio, aunque se sabe que los debates no definen el resultado final de una elección. El tiempo acomoda a todos en su lugar.    

BOMBAZOS…

La designación del ex rector Serafín Ortiz Ortiz como candidato  la presidencia municipal de Tlaxcala por el Partido Alianza Ciudadana (PAC) cayó como balde de agua para el resto de los aspirantes, y es que nos dicen que Ortiz Ortiz va con todo para ganar la capital, Ya se verá.

ARTILLERÍA PESADA…

La sequía registrada en todo el país provocará que en los próximos días se eleve el precio del kilogramo de carne de res y cerdo, así como el de las frutas y verduras; es más, se pronostica que habrá escases de estos alimentos, por eso, la recomendación es cuidar el agua potable.

Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.