Buenos días. Llegué a Huamantla, Tlaxcala, en el 2002, a lamer severas heridas; allí, acudía a tertulias y eventos organizados por el ayuntamiento local o bien por familias muy respetadas. Fue en una de esas reuniones que conocí a un jovencito, siempre acompañado por su amigo guitarrista que puntuales se hacían presentes en todo tipo de velada.

Me lo presentó la señora Blanquita Rugarcía, que, conociendo mis antecedentes de trabajo en la televisión y en la industria del disco pensó podría darle una opinión o un consejo.

El chavo se arrancó cantando canciones de Lara y de Álvaro Carrillo, su bien timbrada voz llamó mi atención.  Días después, mi hija, la que también le hacía al canto, me lo volvió a presentar y me dijo: escúchalo pá, canta bien padre. Ese jovencito era el hoy famosísimo Carlos Rivera. En ese entonces jamás imaginé la proyección que con el tiempo ocurriría.

Carlos Augusto Rivera Guerra nació el 15 de marzo de 1986, en Atlzayanca, Tlaxcala, México. Hijo de José Gonzalo Gilberto Rivera Ramírez y María de Lourdes Guerra Martínez.

Con una marcada formación religiosa, por estudiar en una escuela de monjas estuvo en la disyuntiva entre ser sacerdote o cantante.  Se considera muy devoto por lo que siempre lleva con él imágenes religiosas.

La familia de Carlos siempre le enseñó a luchar por la vida, y fue a la edad de 15 años cuando tomó la decisión de ser cantante. Sus padres no se opusieron, pero se mostraron herméticos al respecto, especialmente su madre por las expectativas que tenía para su hijo, a quien le hubiera gustado verlo como un profesionista.

Esta decisión vino después de que ganara el primer concurso de canto de su vida. Fue en su primer año de preparatoria cuando entró al concurso de la escuela. Al ganarlo, pasó a la final estatal y obtuvo el primer lugar.

Empezó a cantar en fiestas y bares; al ser el ganador del concurso estatal, estaba invitado a todos los festivales, así que gracias a todas estas presentaciones su proyección como cantante fue creciendo en Huamantla.

Seguro de su talento, él mismo organizaba sus conciertos, buscaba patrocinadores y se encargaba de cobrar la taquilla, recuerda que en ese entonces cobraba 20 pesos por cada entrada. Poco a poco la gente fue conociéndolo y cada vez asistían más a sus conciertos.

Conforme el tiempo pasaba, Carlos se convertía día con día en toda una estrella de Huamantla. Su popularidad crecía de tal manera que fue invitado a la estación de radio de la ciudad para una entrevista. La gerente de la emisora al escuchar su voz le propuso convertirse en el presentador del espacio juvenil de la radio. Así que con tal sólo 16 años de edad se convirtió en el locutor del programa “Audio manía”.

A principios de 2003, se anunciaron las audiciones para la segunda generación de “La Academia” programa estelar de TV Azteca. En mayo de ese año, Carlos viajó a la Ciudad de México para asistir al casting, logró pasar todos, hasta llegar a ser de los 40 finalistas, sin embargo, no le permitieron entrar a la última etapa porque no cumplía con uno de los requisitos principales: ser mayor de edad.

A pesar de que Carlos contaba con todo el talento para pertenecer a la 2ª generación de La Academia, ese inconveniente lo obligó a detener sus planes por un tiempo. Regresó a su natal Huamantla y continúo con su carrera a nivel local.

Para ese entonces, Carlos ya estaba considerado como uno de los talentos más grandes de su solar. Su lucha, esfuerzo y logros fueron reconocidos al dedicarle una sección en el museo de la ciudad, donde se colocó una de sus fotos además de todos los trofeos y reconocimientos que hasta el momento había conseguido.

A pesar del éxito que había logrado y que crecía día con día, Carlos sabía que no podía conformarse y que necesitaba buscar una nueva oportunidad con el que hasta ese momento era su más grande sueño: formar parte de La Academia.

En febrero de 2004 Carlos se volvió a presentar al casting esta vez en Veracruz; ya el tiempo estaba de su lado, tan sólo le faltaban unos meses para cumplir la mayoría de edad.

En el puerto, quedó entre los 8 mejores, por lo que pasó a la final nacional, donde eligieron a 36 finalistas hasta concluir el proceso con 18 participantes que formarían la 3ª generación de La Academia.

Entre esos 18 participantes, estaba Carlos. Su sueño por fin se había cumplido, su familia feliz al igual que él, sin embargo, la situación con su madre era difícil por lo que prefirió ser reservado y no contarle que estaba dentro del programa.

Una vez dentro del Reality Show, su vida tomó el giro que él buscaba y quería. Estaba feliz ante la nueva experiencia, la energía de cada concierto era maravillosa y las clases las disfrutaba día a día

Las diferencias que tenía con su madre llegaron hasta la pantalla, sin embargo, lograron solucionarlas al interior.

Carlos desde un principio fue favorito para ganar, y así fue. El 4 de julio del 2004, Carlos Rivera Guerra se convirtió ganador de “La Academia 3”, ganando así 3 millones de pesos. La final se disputó en Acapulco.

Las oportunidades para desarrollar su carrera siguieron presentándose, inició una gira por todo el interior de la República Mexicana y Estados Unidos al lado de sus compañeros de la 3ª Generación de La Academia y participó en el Desafío de Estrellas.

En mayo de 2005, firmó contrato con SONY BMG e inició la planeación de lo que sería su primer álbum.

La crítica especializada nacional y extranjera ha reconocido sus cualidades vocales e histriónicas, así como su fuerza interpretativa, esto, aunado a un trabajo y entrega constantes en cada escenario en el que se para, produciendo una conexión con el público, empatía y admiración; por todo ello, Carlos Rivera se ha dado a conocer con paso firme en diversos países y, hoy por hoy, es una de las figuras de México con mayor proyección y futuro a nivel internacional.

En 2006 incursionó en teatro con absoluto éxito y pronto estos escenarios se convirtieron en otra de sus grandes pasiones. Comenzó protagonizando la obra musical “Bésame Mucho”, donde nuevamente daría cuenta de su calidad vocal. Más tarde participó en la puesta en escena “Orgasmos, la comedia”, el reconocimiento continuó y aunque la exigencia era mucha, Carlos dio muestras de su profesionalismo y, con su tercera obra, se convirtió a los 22 años en el actor más joven del mundo en protagonizar como invitado especial el rol masculino de “La Bella y la Bestia”, primera gran producción de Disney On Broadway montada en México.

“Mamma Mía”, su cuarta obra de teatro se convirtió en la primera obra que protagonizaría como actor titular durante la temporada completa, siendo reconocido por la APT (Agrupación de Periodistas Teatrales) en la categoría de Mejor Coactuación Masculina del Año.

Ese mismo público teatral que reconoció su estupenda voz en vivo, es también el que lo ha seguido en su camino discográfico. Tras su álbum debut homónimo, con el cual obtuvo Disco de Oro, que incluye éxitos como “Te me vas” y “No soy el aire”, Carlos Rivera presentó en 2010 Mexicano, su segunda producción discográfica con la cual también obtuvo el reconocimiento de Disco de Oro y en la que interpretó un puñado de grandes canciones mexicanas, dejando claro que tiene la estatura para ser un digno representante de nuestra música. Este disco fue producido por Kiko Campos y lo presentó con lleno total en el emblemático Teatro de la Ciudad.

En 2011 llegó a su vida “El Rey León”, el musical de Disney, obra que marcaría un parteaguas en su carrera.

Tras diversos intentos por registrarse al casting vía internet, fue a través de Ocesa Teatro que recibió la invitación para hacer una prueba en video, la cual fue tan bien recibida por la compañía productora en España, Stage Entertainment, que de inmediato se le pidió viajase a la Península Ibérica para hacer la prueba en vivo frente a los directores de Disney.

En una competencia con más de 10,000 aspirantes de todo el mundo, después de su exitosa audición Carlos obtuvo el protagónico de “Simba”; era la primera vez que un artista mexicano encabezaría el elenco de una obra de Disney en su arranque fuera de México. El impacto fue inmediato: felicitaciones del mundo entero a los productores y directores del musical, reseñas alabando su voz y presencia, gente de otros países llegando a España para ver este gran espectáculo y sobrecogerse con su interpretación, entrevistas, reportajes e invitaciones a los máximos eventos de la sociedad española: en pocas palabras, “un mexicano triunfando en el extranjero”.

Entre 2011 y 2013 más de un millón de personas fueron testigos de su talento en las más de 700 funciones que siempre colgaron el cartel de “entradas agotadas” en el Teatro Lope de Vega en la tradicional Gran Vía de Madrid, hechos que lo llevaron a hacerse acreedor al “Premio al Actor Revelación” en los Broadway World Spain Awards en 2012.

En 2013 continuando con su labor discográfica simultánea a su exitoso cierre de temporada en “El Rey León”, lanzó en junio su tercer disco titulado “El hubiera no existe”, un álbum que sin duda lo catapultó hacia otros territorios, consiguiendo llevar su música a países como España, Argentina, Venezuela, los de Centroamérica e incluso Portugal, por mencionar algunos, y con el cual en México una vez más conseguiría la certificación de Disco de Oro al igual que sus dos primeros producciones.

Con “El hubiera no existe”, Carlos mostraría su faceta de autor sumando sus composiciones a las canciones de autores como Mario Domm, Franco De Vita, Leonel García y Pablo Preciado, quienes escribieron a medida para él, trabajo que generó auténticos éxitos como “Fascinación”, “Sólo tú”, “Gracias a ti”, “El hubiera no existe”, “Por tï” y “Qué fue de nuestra vida”, este último a dúo con Franco De Vita y “No deben marchitar” a dúo con India Martínez.

“El Hubiera No Existe Tour” lo llevó a realizar casi 60 conciertos con múltiples “entradas agotadas”; en 2 ocasiones la Sala Joy Eslava de Madrid, Luz de Gas de Barcelona, el Teatro Circo de Murcia, Teatro Leal en Tenerife y las ciudades de Málaga, Valencia y Gran Canaria en España, Buenos Aires en Argentina, Guatemala y en México el Auditorio Cumbres de Monterrey, 2 veces el Teatro Diana de Guadalajara y 3 veces el mítico Teatro Metropólitan de la Ciudad de México.

Por otra parte, vale la pena señalar que muy pocos jóvenes artistas han sido galardonados con un reconocimiento sumamente especial: el Premio Antena CIRT por “Mérito Artístico”, el cual le fue entregado a Carlos Rivera por el presidente de México, Lic. Enrique Peña Nieto, en noviembre de 2013.

En 2014 en España participó como asesor de coach de Malú en el programa “La Voz Kids”, una de las emisiones con mayor rating de aquel país. Además, fue reconocido con el Premio Dial como “Artista Revelación” al mismo tiempo que celebraba sus primeros 10 años de carrera y lo celebró con un disco en vivo titulado “Con Ustedes….Car10s Rivera En Vivo”, grabado en directo desde su segundo concierto en el Teatro Metropólitan. Y quien mejor para presentar el documento audiovisual que la voz del gran Franco De Vita quien ha sido maestro y uno de los artistas que más ha creído en Carlos desde sus inicios compartiéndole su escenario en múltiples ocasiones y en diferentes países.

En 2015 el musical “El Rey León”, se volvería a cruzar en su camino y después del éxito obtenido en España de manera contundente y sin espacio para las dudas, Carlos protagonizaría nuevamente el papel de “Simba”, pero ahora en -su- México, volviéndose el musical más taquillero en la historia del país. Actuó en poco más de 300 representaciones entre 2015 y 2016, sumando entre México y España más de mil funciones y más de un millón y medio de espectadores. Esto lo convierte en el único actor en el mundo en liderar 2 producciones originales de “El Rey León”; el único protagonista en grabar 2 discos de la banda sonora del musical además de participar en la adaptación de las letras de las canciones para la puesta mexicana.

En paralelo a “El Rey León” México y al lanzamiento de “Yo creo”, Carlos participó en su primer proyecto de televisión como coprotagonista de la teleserie “El Hotel De Los Secretos”, en el papel de Andrés, siendo el proyecto más ambicioso de Televisa de los últimos años, ¡3 planes al mismo tiempo! Esto sólo nos habla de la disciplina y compromiso que este gran artista de nivel internacional tiene con su carrera y su público.

La producción titulada “Yo creo”, debutó en el No. 1 de la lista general de ventas de AMPROFON en México, en el No.1 de iTunes general de España y a tan sólo unas semanas de ser editado consigue la certificación de Disco de Oro en México y recibió por segunda ocasión el Premio Dial en España.

Este último álbum le ha permitido consolidar una importante gira en varias ciudades de la Republica Mexicana, llenando escenarios como el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, el Auditorio Telmex en Guadalajara, en España el Teatro Circo Price de Madrid, Auditorio Adán Martín de Tenerife y las ciudades de Málaga, Murcia, Gran Canaria, y Palma de Mallorca, en Argentina el Gran Rex de Buenos Aire, las ciudades de Rosario y Córdoba así como el Teatro Nescafé de Las Artes de Santiago de Chile.

Por si todo esto fuera poco, grabó el tema “Voy A Amarte” para la telenovela argentina “Los Ricos No Piden Permiso”, que la más exitosa en ese país.

Son tal el éxito y credibilidad en su carrera que lo han llevado a colaborar con grandes artistas como Juan Gabriel, José José, Pandora, Reyli Barba, Ana Torroja, Martha Sánchez, Franco De Vita, Ana Carolina y Daniel Boaventura (Brasil), Paulo Gonzo (Portugal), Abel Pintos (Argentina), e India Martínez (España). Inclusive las más relevantes figuras de diferentes ámbitos como intelectuales, deportistas de talla mundial y jefes de estado, desde los reyes de España, Don Felipe VI y Doña Leticia, hasta el mismo Papa Francisco, han aplaudido su talento.

Por esto y muchas cosas más que faltan por ocurrir, Carlos Rivera es hoy por hoy el artista mexicano con mayor proyección internacional.

Y pensar que ahora ese gran artista, lo tuve muy cerca cantándonos a solo 6 personas en aquel lejano convite.

Del año 1982 al 2002 colaboré externamente y de manera estrecha en CBS Columbia, convertida después en Sony Music, realizando presentaciones, videos, convenciones y lanzamientos de todos sus artistas; conviví muy estrechamente con ellos y logré hacer amistad con muchos. Carlos ya no me tocó, desgraciadamente, pues me hubiera gustado trabajar con él, pero sé que su Label Manager es una gran amiga con la que trabajé estrechamente Marita Esquivel.

Les dejo su último material para que lo escuchen titulado, “Me muero”

https://youtu.be/eque7FLe-5U

Los espero la próxima entrega.