O una de dos: o las autoridades estatales nos creen muy incultos, nacos y poco preparados, por decir lo menos o éstas son muy cínicas y descaradas. 

Y es que hacernos creer qué, porque en otras ciudades, los museos tengan bares, restaurantes y antros, nosotros deberíamos copiar lo que hacen allá para considerarnos de primer mundo, es tener poca…… vergüenza.

Pero sin duda, lo sucedido en el antro fifi disfrazado de restaurant-bar ubicado en la terraza del MAT dará mucho de que hablar y aunque nos quieran vender la idea de que rectificaron, la imagen de las autoridades estatales quedará siempre en entre dicho y los acompañará a lo largo de todo el sexenio.

Por cierto, no me lo crea a mí, pero según versiones de varios empresarios del sector, dicen que dicho negocio cuenta con la protección al más alto nivel y que en próximos días abrirá como si nada hubiera pasado, y es que se sabe que los personajes que dan la cara, son solo los prestanombres. 

Panotla navega a la deriva…

La presidenta municipal Felicitas Vázquez Islas es uno de esos casos emblemáticos donde enfundados en las siglas y colores de Morena, lograron acceder a espacios de poder, dejando en mal al partido del Presidente de la República.

La filosofía del no robar, no mentir y no traicionar al pueblo parece que no aplica para la actual presidente municipal, que ha hecho de todo, menos para lo que se comprometió con la gente de su demarcación.

Una de las quejas más recurrentes es que el dinero destinado para obras y acciones en las comunidades no ha llegado; que sus cuentas públicas están plagadas de anomalías financieras y qué si el Órgano de Fiscalización Superior o el Congreso local las revisaran con lupa, seguro ya tendría reprobadas más de una.

Además, sus sesiones de Cabildo son de mero trámite, no se discute ni se hace nada que beneficie o demande el pueblo, solo se aprueba lo que a la señora le conviene, aunque sea en detrimento de sus gobernados.

Con este y otros antecedentes, podemos decir que esta administración está destinada al fracaso. Ya veremos.