En el juego político los distintos actores construyen escenarios optimistas, tendenciales o de piso. En el caso de México el juego de morena y el posible escenario que ha construido tiene una alta tendencia a ser optimista. Para que el actual gobierno de morena tenga continuidad utiliza como estrategias los siguientes elementos fundamentales: el poder público, el dinero público (presupuesto 2024), a las personas con conocimientos escasos (programas sociales), los medios de comunicación del estado, embajadas a ex gobernadores priistas, Gobernadores, Secretarios de Estado o de Empresas Paraestatales, minimizar los grandes problemas nacionales y victimizándose así mismo. El juego para 2024 es claro, la intención de voto hacia Morena es de 42%. No obstante, recordemos que en 2018 morena obtuvo un poco más de treinta millones de votos, en su elección intermedia se redujo a poco más de 18 millones de votos. La narrativa como estrategia se ha construido para hacer pensar que morena ganará las próximas elecciones presidenciales, frente a ello, lamentablemente la denominada “oposición” no da muestra de cuáles son sus estrategias y acciones que los pueda convertir en competidores serios en el próximo proceso electoral de 2024.

A partir del contexto que se plantea, es indispensable que los distintos actores políticos contrarios a morena, reconozcan y acepten el capital político que tiene cada uno de ellos y la enorme oportunidad para construir un escenario optimista en el que pueda ser atractivo para más de sesenta millones de ciudadanos que no votan en las elecciones constitucionales,  si y soló si, adoptan un pensamiento y una idea estratégica en favor de la mayoría de todos los mexicanos, en el que se puedan plantear planes, proyectos y programas que sean atractivos para la gran población joven menor de 39 años en este país, además de una vinculación y coordinación efectiva entre su aspirante a la Presidencia de la Republica y los tres partidos que por separado la han postulado.

La propuesta central es un anhelo para la auténtica competencia política, elevando su nivel; así como, tener la esperanza para que en 2024 se fortalezca la democracia en el país y al interior de los partidos políticos, se eleve el nivel del Estado de Derecho y se establezca una autentica separación y colaboración entre los tres Poderes de la Unión.

El escenario ideal es que los distintos actores eleven su capacidad política y de gobierno para construir desde ahora un auténtico gobierno de coalición operativo, funcional, con capacidad de gobierno para lograr la gobernabilidad que el país requiere, sin importar las ideologías, escuchando e incluyendo todas las voces que de manera natural se pueden tomar como contrarias, es decir, establecer una autentica gobernabilidad en condiciones de alta pluralidad.

Los grupos de poder y los distintos actores políticos no deben olvidar que los sistemas previstos en nuestra constitución tienen como propósito que las instituciones, el poder público y el dinero público, se practiquen y apliquen en favor de todos los mexicanos. Exigimos por tanto una autentica vinculación entre sistemas constitucionales y ciudadanía con el propósito mayor de tener Buenos Gobiernos como un Derecho Humano.