Aunque sea una broma cruel, existe un sector de la economía –informal- que no necesitará reactivarse con lo que la 4T llama la Nueva Normalidad: El de la inseguridad, la violencia, debido a que la crisis sanitaria Covid19 no es un obstáculo para que el país acumule asesinatos, feminicidios, secuestros, robos y ataques sexuales.

Incluso, entre enero y abril del 2020, pese al confinamiento generalizado que supuestamente generó el Covid19, en México hubo más homicidios dolosos, feminicidios y violaciones equiparadas que en los mismos meses del año anterior, según cifras oficiales del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).

Los números hablan por sí mismos y demuestran que la ola de inseguridad y violencia no se frenó por la contingencia sanitaria. Entre enero y abril del 2019, el país acumuló 9 mil 605 asesinatos dolosos, mientras que en los mismos meses –pero de este año- fueron 9 mil 751, lo que implica que se cometieron mil homicidios más.

También hubo más feminicidios. Entre enero y abril del 2020 México contó 308 delitos de este tipo, en tanto que en los cuatro primeros meses del año pasado se denunciaron 305 eventos de este tipo: https://desdepuebla.com/2020/04/22/fiscalia-de-puebla-esclarece-feminicidio-ocurrido-en-la-colonia-snte/.

DE LAS VENTAJAS DE QUEDARSE EN CASA: MENOS ROBOS Y SECUESTROS

Pero no todo ha sido negativo durante la crisis de sanidad por el Coronavirus, ya que el quedarse en casa ha generado una disminución notoria de las querellas por secuestros en México. Así, mientras entre enero y abril del 2019 se denunciaron 512 delitos de este tipo, en los primeros 4 meses de este año el número de querellas por ese delito fue de 306.

Otra ventaja de quedarse en casa ha sido, al parecer, una notable reducción en la cantidad de hurtos. Así, entre enero y abril del 2020 el SNSP registró  211 mil 925 acusaciones formales de robos, cuando el año pasado en esos mismos meses se llevaban 260 mil 015, que ratifican una disminución cercana al 20 por ciento en la incidencia de este delito: https://desdepuebla.com/2020/06/04/detiene-ssp-a-cuatro-integrantes-de-una-banda-dedicada-al-robo-de-transporte-de-carga/.

En el caso de los ataques sexuales, la pandemia aceleró un lado obscuro de los mexicanos, porque aumentaron en más del 10 por ciento los casos de violación equiparada; es decir, las que se cometen contra los indefensos, como menores de 14 años de edad y/o personas que no están en posición de resistirse a la agresión o de decidir por sí mismo si se accede al sexo.

Así, mientras entre enero y abril del año pasado se denunciaron mil 155 violaciones equiparadas, en el 2020 se registraron mil 378 acusaciones de este tipo: https://desdepuebla.com/2020/05/06/pederasta-de-teziutlan-ataco-sexualmente-a-nina-de-13-anos/.

VIOLENCIA Y DELINCUENCIA, MÁS MORTÍFERAS QUE CUALQUIER BICHO

En el rubro de las violaciones simples sí se dio una disminución este año respecto a las señaladas en el 2019, cuando hasta abril se tenía un registro de 4 mil 183 acusaciones por este delito, en tanto que para el 2020 fueron 4 mil 141, lo que representa una muy ligera reducción.

Los números del SNSP –sumados a las cifras negras, es decir, a los delitos que no se denuncian formalmente- ratifican que, al menos en nuestro país, la violencia, delincuencia e impunidad son más mortíferas y destructivas que cualquier microorganismo, ya que sus secuelas son inolvidables: https://drive.google.com/file/d/1AON_JM-LWAzHx9UjQYMHaguIwH6O_-b_/view.

Y contra ellas no hay López Gatell, ventiladores, medicinas ni nada que se les oponga, excepto la decisión de un gobierno federal que, hasta ahora, no ha mostrado intención ni capacidad de revertir el contexto de inseguridad generalizada que prevalece en nuestro país desde hace por lo menos 12 años.