Historias de alcaldes
La todavía embajadora de México en Colombia, senadora con licencia y ex presidenta municipal de Puebla, Blanca Alcalá Ruiz, carga desde hace años con el San Benito de que “no cumple acuerdos”, que le afectó sobre todo en la elección local del 2016, cuando contendió por la gubernatura y perdió ante el actual mandatario, Tony Gali Fayad.
Quien le puso ese desagradable mote fue –¿quién más?- el tristemente célebre “Góber Precioso”, Mario Marín Torres, cuando la presidenta, entonces electa, fue a presentarle los nombres de su gabinete para el ayuntamiento de Puebla:
-Mmm, faltan nombres, Blanca, no designas a mi hermano Roberto (Marín Torres) como secretario de Agricultura, como lo acordamos-, le reclamó el “enano maldito”, con su acostumbrada y fuerte pestilencia a licor.
-Gobernador: Roberto será el director de Agricultura, como quedamos, y efectivamente crearé algunas dependencias nuevas, pero no tengo contemplado crear una secretaría de Agricultura. Será dirección para él, respondió la entonces alcaldesa electa.
-¡Pero quedamos en que harías a mi hermanito Roberto tu secretario de Agricultura!, levantó la voz Mario Marín, que era lo único que podía levantar en ese tiempo.
-No, señor gobernador, acordamos una dirección de Agricultura para Roberto y así se hará.
El “Góber Precioso”, hoy idolatrado en algunos sectores estatales del PRI y Morena, hizo un berrinche, su carnal –que era un auténtico ignorante- no entró como funcionario al ayuntamiento de Puebla y…se le colgó a Blanca Alcalá la leyenda negra de que “no cumplía acuerdos”…gracias a Mario Marín Torres.
EL TONTO ÚTIL
“Nadie sabe para quién trabaja” y eso, precisamente, le ocurrió al ex edil de Puebla y candidato perdedor el 1ro de julio pasado en la contienda por la alcaldía de la capital, Eduardo Rivera Pérez.
Resulta que –según mediciones realizadas por ¡Morena! – la intención de voto hacia Lalito Rivera se disparó cuando se presentaba como antimorenovallista y amagaba con romper en el PAN y lanzarse a la aventura como candidato “independiente” o, incluso, amlista. Pero oyó el canto de las sirenas y aceptó postularse, nuevamente, por el blanquiazul.
Lo que Eduardo Rivera Pérez no sabía es que su candidatura tuvo una intención de voto estable, de entre 190 y 210 mil sufragios, los que a todas luces le serían insuficientes para vencer a la futura presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco.
Y otra cosa que Lalito tampoco sabía es que –según fuentes de Morena que pidieron el anonimato para no contrariar a los irascibles Gabriel Biestro y Luis Miguel Barbosa- la postulación de Rivera Pérez sí sirvió para apuntalar la campaña de Martha Erika Alonso Hidalgo y llevarla a ganar la contienda.
Incluso, los morenistas señalan que los eventos de campaña conjuntos entre Lalito Rivera y la gobernadora electa sí contribuyeron a fortalecer a Martha Erika Alonso…pero no le dieron ganancia alguna a él, porque no pudo generar ninguna expectativa diferente de la 1ra vez en que contendió por la alcaldía de Puebla y sí ganó.
JAVIER PALOU, COORDINADOR EJECUTIVO DEL PRÓXIMO AYUNTAMIENTO DE PUEBLA
Javier Palou es, sin duda, uno de los personajes más cercanos a la presidenta municipal electa, Claudia Rivera Vivanco, como lo demuestra el hecho de que lo ha incluido en todas las encomiendas importantes, incluyendo el Comité de Transición: http://desdepuebla.com/index.
Javier Palou se ha consolidado como uno de los personajes más cercanos a Rivera Vivanco y, en los hechos, se perfila para ser el coordinador de su gabinete con el nombramiento de Coordinador Ejecutivo de la Presidencia. Se espera que sea el encargado de vigilar que el próximo ayuntamiento cumpla con los conceptos ideológicos y políticos de Morena.
Javier Palou y Rivera Vivanco coincidieron en el activismo a favor de Morena y Javier tiene varias ventajas para la edilesa, ya que por su linaje familiar conoce a los hombres y mujeres del poder en Puebla y, además, es un convencido de la izquierda y de la oferta programática morenista: http://desdepuebla.com/index.
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