Dejaron solos a Luis Miguel Barbosa y a Yeidckol Polevnsky
Citlali Ibáñez Camacho, mejor conocida en los bajos mundos de la grilla como Yeidckol Polevnsky, fue clave para que su compañero en el Senado y amigo, Luis Miguel Barbosa Huerta, se convirtiera en el candidato de Morena a la gubernatura de Puebla en detrimento de cuadros que lucían más competitivos, como Alejandro Armenta Mier, Enrique Cárdenas o, incluso, el propio Enrique Doger Guerrero.
Era 2016 y Barbosa Huerta se comprometió con Citlali Ibáñez a reventar la alianza PAN-PRD con Tony Gali como candidato al gobierno de Puebla y lo consiguió, con la ayuda de “tontos útiles” que se creyeron el cuento de la “izquierda unida”, como Roxana Luna, Socorro Quezada, etc.
AMLO y Yeidckol Polevnsky le pusieron otra condición: desmantelar, desmadrar a los senadores del PRD antes de pasarse abiertamente a las filas de Morena. Luis Miguel lo cumplió a cabalidad y logró que varios ex perredistas de la Cámara Alta se pasaran con Andrés Manuel López Obrador, como Lorena Cuéllar, Luz María Beristáin, Raúl Morón, etc: https://www.excelsior.com.mx/
Así que es claro que –más que Andrés Manuel López Obrador- el principal respaldo de Barbosa Huerta en Morena es Yeidckol Polevnsky, a quien no le importó hacer el ridículo en la radio nacional hace pocos días al tener que reconocer públicamente que carecen de pruebas del supuesto fraude electoral en Puebla: http://desdepuebla.com/index.
CUAUHTÉMOC BLANCO, CLAUDIA SHEINBAUM DESAIRARON A YEIDCKOL POLEVNSKY
Al interior de Morena es un secreto a voces que Andrés Manuel López Obrador se decepcionó mucho de su ex candidato al gobierno de Puebla, luego de confirmar que no pudo reunir las actas del 85% o más de las casillas, debido a que ello refleja ineficiencia no solamente de Barbosa Huerta, sino también del todavía dirigente estatal del partido y futuro diputado local plurinominal, Gabriel Biestro, quienes habían dicho que sí podrían cuidarlas:http://desdepuebla.com/index.
Y la decepción de AMLO hacia su ex candidato al gobierno de Puebla se transformó en rabia, furia, cuando –el martes 3 de julio, el mismo día en que Enrique Peña Nieto se rindió a sus pies- Barbosa Huerta, Biestro, José Juan Espinosa y Fernando Manzanilla opacaron la nota de su encuentro con el presidente en Los Pinos al generar los hechos violentos en el hotel MM: http://desdepuebla.com/index.
En este contexto resulta más que entendible el hecho de que los gobernadores electos por Morena, como Claudia Sheinbaum, Cuauhtémoc Blanco y Cuitláhuac García, por la Ciudad de México, Morelos y Veracruz; respectivamente, hayan desairado a Citlalí Ibáñez al no asistir a la marcha contra el supuesto fraude que Barbosa y Biestro han denunciado, pero no podido comprobar.
Los 3 saben que existen posibilidades muy grandes de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial (TEPJF) confirme la validez de la elección de Martha Erika Alonso como gobernadora y deberán coincidir con ella en la Conago y en otros eventos políticos: http://desdepuebla.com/index.
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