¿Marines en Tlaxcala?
Hace unos días se presentó un incidente entre policías acreditables y supuestos marines que no debe pasarse por alto.
Los hechos se dieron cuando los efectivos realizaban un operativo de seguridad en el Barrio de San Pedro, en el municipio de San Pablo del Monte.
De pronto se encontraron una camioneta marca Ford, tipo Expedition, color verde olivo, con placas YJL2523 del estado de Veracruz.
Al marcarle el alto, de la unidad descendieron cuatro sujetos vestidos de civil y con armas largas, uno de ellos con uniforme con el nombre de la MARINA.
Dijeron ser de inteligencia de la Marina, que andaban de incógnito y les pidieron a los oficiales retirarse del lugar para no entorpecer sus funciones.
El caso es que al pedirles su identificación, los supuestos marines encañonaron a los estatales, quienes retrocedieron superados en número.
Una vez solicitado el apoyo, inició su persecución sobre la Vía Corta Puebla-Chiautempan, logrando nuevamente su intercepción.
Se les solicitó que descendieran de la unidad y que se identificaran plenamente, percatándose que viajaban ocho sujetos con armas largas.
De nuevo se niegan rotundamente a identificarse y a descender de la unidad, pero se les escucha que piden apoyo radial.
Al lugar se presentan dos camionetas marca Chevrolet, tipo Silverado, en color verde, sin rotulo alguno, en las cuales iban a bordo un aproximado de ocho personas por unidad.
Los sujetos vestían presuntos uniformes de la marina y radios transmisores, los cuales descienden en actitud agresiva, cortando cartucho.
Enfrentaron verbalmente a los acreditables manifestándoles que se abrieran, que "dejaran de estar chingando o iban a rafaguear las patrullas".
Otra vez, al verse en desventaja, los estatales retrocedieron y presionaron el botón de pánico, mientras se daba un intercambio de palabras.
Los supuestos marines recibieron la orden de replegarse por radio transmisor y se retiraron con rumbo a la ciudad de Puebla.
El incidente que se registró deja varias interrogantes, pero la principal tiene que ver con saber si eran realmente marines.
Sobre todo porque de serlo, no hay razón para no querer identificarse y encañonar a los elementos policiacos del estado.
Otro hecho que preocupa fue que por radio, los municipales solicitaron la presencia de la base militar de San Pablo del Monte, sin respuesta alguna.
Hasta aquí la historia que nos demuestra la fragilidad en que encuentran nuestras poblaciones y nuestros cuerpos policiacos.
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