¿Hasta cuándo?
Todo parece indicar que la seguridad y el combate a la delincuencia, no forma parte de la agenda del gobierno de la 4T en Tlaxcala.
Desde que inició el sexenio de Lorena Cuéllar, la inseguridad pública se encuentra al alza, con la comisión de delitos nunca antes vistos.
Tan solo en la semana que concluyó, dos comerciantes de un negocio de pollos fueron baleados en Apizaco, por negarse a pagar derecho de piso.
En San Pablo del Monte, en el interior de una barranca, fue encontrado un sujeto decapitado, con visibles huellas de violencia.
Y en la rivera del Río Zahuapan, a la altura de Tizatlán, fue abandonado el cadáver de un sujeto con las manos atadas.
Sin dejar de mencionar que ya son constantes los asaltos con bala a los automovilistas, a lo largo y ancho del estado.
Todos esos crímenes, tienen visos de haber sido cometidos por la delincuencia organizada, que ya opera a sus anchas en Tlaxcala.
Mientras es ocurre, tal parece que a la autoridad estatal no le corre prisa designar al titular de Seguridad Pública del Estado.
Nada justifica que una área tan importante para proteger a la población, se encuentre acéfala desde hace más de cinco meses.
En lo último que nos quedamos, fue que se estaba haciendo un sesudo análisis a la terna de prospectos para ocupar la SSC.
Aunque todo parece indicar, que no hay voluntad política para velar por la seguridad de los tlaxcaltecas, pese a llamados para que se atienda esa problemática.
Esos oídos sordos, le pueden traer costos políticos a la incipiente gestión morenistas, pues no hay que olvidar que en pueblo chico, el chisme es grande.
Y los hechos violentos que se registran, dominan las conversaciones de la gente en todas las comunidades de Tlaxcala, lo que está acrecentando la preocupación e indignación social.
victortamayo5@hotmail.com
Comentarios