En Tlaxcala, el poder Sí se comparte
El gobierno morenista de Tlaxcala, cada vez se asemeja al sexenio del panista Héctor Ortiz Ortiz, opacado por el poder federal.
En los años dorados del PAN, el gobernador del estado manejó la política interna con libertad, pero fue acotado por la federación.
La entonces diputada federal, Adriana Dávila, fue un auténtico dolor de cabeza, pues el presidente Felipe Calderón le otorgó todo el poder para designar a los delegados federales.
En los hechos, la hoy aspirante a dirigir la dirigencia nacional del PAN, fungió como una verdadera "súper delegada federal".
Y desde esa posición, Adriana Dávila se proyectó para arrebatarle al gobernador Héctor Ortiz Ortiz, la postulación de la candidatura al gobierno del estado.
El mandatario HIOO ni siquiera hizo mutis, pues entendió que donde manda capitán, no gobierna marinero, y que gobernador no pone gobernador.
Lo anterior viene a cuento, por lo que está ocurriendo en Morena, donde se vive ya una carrera sucesoria muy adelantada.
Hace unos días, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera decidió salir de la palestra y robar reflector al gobierno de Lorena Cuéllar.
Y este lunes, la legisladora de Calpulalpan realizará una gira por el municipio de Tlaxcala, que gobernará Alfonso Sánchez García, uno de sus contrincantes políticos.
Ana Lilia Rivera Rivera develará los bustos que donó a la Ciudad de Tlaxcala y a la comunidad de San Esteban Tizatlán.
Se trata de dos eventos de poca trascendencia, pero suficientes para hacer ruido mediático, ante la abierta guerra sucesoria que ya se libra en Morena.
Esta guerra ya provocó dos reveses políticos para el gobierno estatal, al reconocerse los triunfos electorales de Ana Bertha Mastranzo y Salvador Santos Cedillo.
Y podría fracturar la próxima integración del Congreso Local, con la suma de diputados lastimados por el poder, a una virtual bancada bajo el control de Ana Lilia Rivera.
Al tiempo.
RÁFAGAS...
Ya que hablamos de los reveses electorales, nos enteramos que donde más festejaron los palos que le dieron a los fallos del TET, fue en el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones.
La decisión de la Sala Regional del TEPJF de validar los triunfos en el distrito local 15 y en el municipio de Huamantla, fue también un reconocimiento de que el ITE hizo bien su trabajo.
Trabajo que estaba siendo manchado por los magistrados del parcial, servil y vendido Tribunal Electoral de Tlaxcala.
victortamayo5@hotmail.com
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