Como en Feria
A la procuradora General de Justicia del Estado, Ernestina Carro Roldán, le fue como en feria durante su comparecencia ante diputados locales.
Los legisladores tlaxcaltecas increparon duramente a la fiscal, por la alta comisión de delitos y los rezagos alarmantes en la procuración de justicia.
El incremento de homicidios, feminicidios, trata de personas, desapariciones, robos de autos y la delincuencia organizada, fueron los temas que se pusieron sobre la mesa.
La procuradora General de Justicia negó la presencia de delincuencia organizada, pero los congresistas locales no le creyeron.
Tampoco, pudo responder con claridad sobre la eficiencia de los protocolos para atender los delitos por cuestiones de género.
En lo general, el ejercicio en el Congreso Local, pasó la prueba como un ejercicio democrático inédito, pero poco servirá si no cambia el discurso oficial.
Desde que inició el gobierno de Lorena Cuéllar, la inseguridad pública ha estado al alza en Tlaxcala, con delitos que antes no se veían.
Se han incrementado los homicidios, así como los levantones, las extorsiones y el cobro de piso, mientras la autoridad sigue con la cantaleta de que somos el estado más seguro del país.
Mientras se siga con ese cuento chino, de nada valdrán las comparecencias de funcionarios públicos que siguen negando la realidad.
RÁFAGAS...
Dos películas se vieron en el rescate de dos menores de edad, que fueron retenidos por causar daños a un vehículo particular, en la comunidad de Ixcotla.
La primera trama revela que se trató de una acción coordinada por la dirección de Seguridad Pública de Chiautempan, con autoridades estatales y federales.
El protocolo aplicado evitó el intento de linchamiento de los jóvenes, quienes fueron sorprendidos intentando robar unos neumáticos.
El otro libreto, se lo adjudicó el secretario de Gobierno, quien lamentablemente regateó al municipio el mérito de la acción policiaca.
Se entiende que Sergio González se cuelgue medallas en su busca del Senado de la República, pero solo queda en evidencia cuando no las merece.
Si el operativo hubiera fracasado, el titular de la Segob con seguridad le hubiera echado la culpa al municipio, como ya ha sucedido en otras ocasiones.
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