La frase de Napoleón Bonaparte, en el sentido de que las victorias tienen muchos padres, pero las derrotas son huérfanas, bien puede aplicarse a lo que está pasando en el PAN de Tlaxcala.

Resulta, que tras el descalabro electoral del pasado 6 de junio, donde el partido azul solo ganó tres presidencias municipales, algunos panistas quieren derrocar a su líder.

Responsabilizan a Gilberto Temotlzin de los pírricos resultados, pero no hay autocrítica sobre lo que no hicieron o dejaron de hacer los liderazgos del Partido Acción Nacional.

El PAN ganó los municipios de Apizaco, Apetatitlán y Coaxomulco, sus bastiones tradicionales, pero dejó ir algunos ayuntamientos que tenía cantados, como Huamantla y Tenancingo.

La elección huamantleca reviste especial atención, porque a Humberto Macías le pusieron la mesa, para ganar la alcaldía, pero la dejó en manos del PVEM.

Aquí no hay pretexto que valga, como ocurrió en otros municipios y distritos, donde los candidatos del PAN, sin dinero, volvieron a ser apabullados por el efecto AMLO, el cual aún se mantiene en Tlaxcala.

El PAN mantuvo su tercera fuerza política en el estado y pese a los malos resultados, seguirá gobernando Apizaco, la ciudad más grande del estado.

Al respecto, platicamos con el dirigente estatal del PAN, quien a un mes de la contienda, ya hizo un análisis de lo que ocurrió en el proceso electoral de este año.

Dice que el PAN se encuentra de pié, porque la derrota es parte de la vida de un partido. "Tampoco hacemos leña del árbol caído, porque sabemos que en democracia se gana y se pierde".

Señala que ahora lo que toca es revisar las causas y trabajar para fortalecernos porque ni la derrota, ni la victoria, en política son para siempre.

Gilberto Temotlzin señala que esa revisión debe partir desde las condiciones en que recibió al partido: estaba endeudado, había gran demanda de inclusión y faltaba orden en las tareas partidistas.

Todo eso se atendió en los ocho meses previos a la campaña, todos los liderazgos tuvieron parte en la definición de candidaturas, se cumplió con la capacitación al 100 por ciento y acompañamos todas las campañas.

¿Qué fue entonces lo que pasó el 6 de julio?

Asegura que se construyó una alianza con cinco fuerzas políticas que fue competitiva, donde el PAN obtuvo los mejores resultados de acuerdo a lo esperado, pero lamentablemente nos distrajimos en batallas, con quien no cerró filas y abrió frentes internos.

¿Se habla de traiciones?

No es momento de hacer afirmaciones ligeras como lo han hecho algunos, eso es politiquería y a eso no me presto. Ello no implica que no se revise el actuar de todos aquellos que tuvieron alguna responsabilidad en la elección.

Lo que sigue, indica es ordenar la casa y ver hacía el 2024, no distraernos en disputas internas. Para el PAN vienen tiempos mejores, Lo hicimos bien, pero no fue suficiente, debemos trabajar más duro y aprender de las derrotas.

Finalmente, habla de lo que espera del próximo gobierno morenista de Tlaxcala. 

"Como dirigente y próximo diputado, seguiré el trabajo coordinado con los municipios y en diálogo permanente con las fuerzas políticas, pues Tlaxcala no merece un gobierno que imite los defectos del gobierno federal y seremos vigilantes del cumplimiento de las promesas de campaña. 

"Estamos dispuestos a trabajar y apoyar todo lo que beneficie al estado y caminaremos en los términos de la coalición legislativa para ser un contrapeso de las decisiones, siempre velando por lo mejor para el estado".

victortamayo5@hotmail.com