Se le viene la noche al gobierno de Tlaxcala
Un viernes negro se le viene al gobierno de Tlaxcala, producto de la intransigencia, falta de capacidad para el dialogo y por vulnerar la autonomía sindical.
Al menos, dos concentraciones están convocadas para realizarse en la ciudad capital, por parte de la sección 27 del SNTSA y del Sindicato "7 de Mayo".
Las dos manifestaciones tienen naturaleza distinta, pero va ser inevitable que mañana coincidan en el zócalo, lo que hará que pongan contra las cuerdas a la administración estatal.
Los trabajadores del 7 de Mayo se plantarán desde las 8 horas frente al Tribunal de Conciliación y Arbitraje, para exigir la Toma de Nota, debido a que el plazo máximo de 60 días ya se pasó.
Este conflicto se generó por el capricho de la gobernadora de entregar el sindicato a Karina Erazo, la hija de su incondicional "comadre", Guadalupe Rodríguez Guzmán, en complicidad con la autoridad laboral.
Actualmente, Guadalupe Rodríguez Guzmán, está asignada al Despacho de la Gobernadora; el hijo Pedro Erazo Rodríguez a la Oficialía Mayor; Karina, está asignada al ITJ, y el otro hijo Daniel está en el Poder Judicial.
Lo que significa que toda la familia cobra sin trabajar en el gobierno de Tlaxcala, pero aún quieren más, el poder sindical porque no les basta.
Los trabajadores repudian a la familia Erazo-Rodríguez, por los abusos cometidos en el pasado y porque con ellos se pierde la autonomía sindical.
Mañana, los burócratas de los poderes públicos buscarán evitar que sus nombres sean mal utilizados en la Asamblea que realizarán los disidentes en el Centro de Convenciones, apoyada por el gobierno.
En los hechos se trata de un problema innecesario que se está buscando el gobierno de la 4T, todo por no respetar la voluntad de los trabajadores del estado.
Igual pasa con la inconformidad de la sección 27 del SNTSA, la cual se dejó crecer por falta de sensibilidad del gobierno de Tlaxcala.
Es la fecha que la gobernadora Lorena Cuéllar no ha cumplido con el abasto de medicamentos, ni ha dado respuesta a los reclamos de los trabajadores del sector salud.
Encima de eso, se reveló que el gobierno de la 4T estaba distribuyendo alimentos en mal estado y caducos a pacientes de hospitales de Tlaxcala.
En vez de atender las denuncias, la administración estatal defendió a la empresa proveedora de los alimentos y arremetió contra la lideresa sindical Blanca Águila.
De esa forma, una vez más quedó evidenciado el bajo nivel del equipo que acompaña a la gobernadora Lorena Cuéllar, por su falta de capacidad para resolver conflictos.
No son los únicos casos, todavía está latente otra concentración de protesta más, en la USET por el incumplimiento de acuerdos con el SNTE.
Lo que el gobierno no quiere ver, es que si se juntan todas las protestas se conformará un coctel muy peligroso que puede trastocar la estabilidad del estado.
Y lo que se percibe es que las protestas no pararán pese a las amenazas en contra de los dirigentes de los sindicatos.
En la pasada movilización de la sección 27 del SNTSA, el gobierno estatal mandó a los granaderos a manera de intimidación.
Para este viernes, hay amagos de utilizar la fuerza pública para desarticular la protesta del sindicato 7 de Mayo, y para recuperar el edificio sindical una vez que termine la asamblea de la "comadre" de la gobernadora.
victortamayo5@hotmail.com
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