Sucesión gubernamental anticipada

Sucesión gubernamental anticipada
Ya no quedan dudas que en Morena, se está dando una carrera sucesoria adelantada, por la gobernatura de Tlaxcala.

Esa fue la nueva lectura política que dejó la reunión que sostuvieron ayer el alcalde electo de la capital, Alfonso Sánchez García y la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora.

La versión oficial señala que las dos cartas fuertes de la gobernadora Lorena Cuéllar, se comprometieron a fortalecer el turismo en el municipio de Tlaxcala.

Pero todo indica que entre ambos se selló un pacto de unidad y no agresión, ante la irrupción mediática de la senadora Ana Lilia Rivera Rivera.

Es un hecho que, el activismo político con el que cerró su periodo la presidenta de la Mesa Directiva del Senado, ya preocupó al poder estatal, de ahí el cierre de filas entre Jose y Ponchito.

Y es que la legisladora de Calpulalpan, dedicó una semana para promover la riqueza cultural del estado en la Cámara Alta, evento que más bien pareció un destape.

Encima de eso, Ana Lilia Rivera tuvo el respaldo de sus compañeros senadores de Morena, PRI y PAN, José Antonio Álvarez Lima, Beatriz Paredes y Minerva Hernández.

También, asistió el director de la Lotería Nacional Marco Mena, lo que significa que recibió el apoyo de tres ex gobernadores.

Y pesar de que se trató de una expo dedicada a Tlaxcala, no estuvieron o no fueron invitados, la gobernadora Lorena Cuéllar o algún otro funcionario estatal.

Así de clara está la pugna preelectoral en Morena, cuando apenas estamos a la mitad de la actual administración estatal.

Nunca antes, se había dado un escenario político tan anticipado en Tlaxcala, por todos los riesgos que implica para la gobernabilidad interna.

En primer lugar, si todo sigue así, debilitarán al gobierno de Lorena Cuéllar, pues los principales precandidatos, Ana Lilia Rivera y Alfonso Sánchez, ya empiezan a sumar apoyos de morenistas y aliados.

Y no tardarán en sumarse a la cargada los próximos diputados locales y presidentes municipales de la 4T, una vez que asuman el cargo a fines de agosto.

No solo eso, el camino aún es largo y en el duelo de vencidas habrá inevitable desgaste y facturas al interior de Morena.

No por algo, los ex gobernadores de Tlaxcala siempre cuidaron que no les saliera de control la sucesión gubernamental.

Alfonso Sánchez Anaya fue el único que desde el inició impulso a su esposa María del Carmen Ramírez, para sucederlo en el cargo, pero así le fue, pues fracturó a su gabinete y quedó en tercer lugar.

En los tiempos del viejo PRI, era a la que está regresando Morena, el que se movía anticipadamente, no salía en la foto. 

Queda claro que ese viejo ritual sucesorio quedó atrás. pues la caballada morenista se encuentra desbocada, sin jinete de por medio. 

victortamayo5@hotmail.com