Los conflictos y las diferencias al interior de Morena en Tlaxcala son más complicados de lo que se piensa, resulta que el Senador por Tlaxcala y dirigente estatal de este instituto político, Joel Molina Ramírez y la Delegada de Programas Integrales de Desarrollo en Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros se evaden para tener lo menos posible acercamientos o conversaciones.

Y es que los señalamientos y acusaciones entre estos dos personajes políticos van en serio; aunque en entrevistas y reuniones aparenten y digan que son respetosos de sus responsabilidades como compañeros de partido, lo cierto es que entre Molina y Cuéllar no hay química y mucho menos voluntad para trabajar unidos en la selección de las personas que ocuparán las candidaturas del próximo proceso electoral, principalmente la de la gubernatura porque ambos pelean este espacio.

Es un hecho que ninguno de los dos cederá a sus aspiraciones simplemente porque Morena en este momento lleva delantera, y de acuerdo a las últimas encuestas si hoy fueran las elecciones tendrían asegurada la gubernatura con cualquier candidato o candidata.

De seguir los conflictos en Morena corren el riesgo de perder la cabeza y cometer errores que los lleven directo a la derrota electoral, situación que aprovechará el PAN, PRI, PRD, MC, y PAC que buscan crear una mega alianza para vencer a los morenos.

El senador Joel Molina recientemente reveló malos manejos y actos de corrupción en algunos programas del Gobierno de México, principalmente en el “Jóvenes Construyendo el Futuro” cuya responsable es la ex senadora Lorena Cuéllar, el mensaje es más que directo.

Los señalamientos van más allá al grado de que Joel Molina habló de una investigación exhaustiva para fincar responsabilidades, todo parece indicar que la intención es imposibilitar, frenar o congelar a Lorena Cuéllar para que no sea la candidata de morena al gobierno de Tlaxcala.

Lo que no sabe el dirigente estatal de Morena es que Lorena Cuéllar diseña un plan “B”, nos enteramos que desde hace un año construye alianzas y amarres para que uno de los partidos políticos de reciente creación la cobije y con ello garantice su candidatura, en caso de que en Morena la neutralicen.

Es más, en varias de las tantas reuniones que ha sostenido con sus seguidores y operadores políticos ha dicho “con o sin Morena seré candidata y próxima gobernadora de Tlaxcala como la ven mis amigos” palabras más palabras menos, pero el mensaje lleva ese sentido, sigue aferrada.

Por su lado, Joel Molina sabe perfectamente que Morena gana en este momento el gobierno de Tlaxcala con cualquier nombre, por lo tanto, no piensa, ni quiere dejar pasar esta gran oportunidad.

La ambición, una mala estrategia de Morena, incluso una equivocada jugada o decisión del propio Presidente Andrés Manuel López Obrador los puede llevar al precipicio, por lo tanto, nadie puede cantar victoria porque en política hay cambios inesperados.

Mientras existan las diferencias y acusaciones por actos de corrupción al interior de Morena no se descartan malos presagios para este instituto político como renuncias, desbandadas y deslealtades. Ya verá.

BOMBAZOS…

El temor del personal médico que atiende a pacientes con Covid-19  va en aumento, al grado de que enfermeras, médicos, camilleros y personal de aseo ya no quieren ir a trabajar, y mucho menos permanecer en las áreas de atención por el virus.

ARTILLERÍA PESADA…

Aún no hay un pronunciamiento oficial que ofrezca tranquilidad a los maestros con padecimientos crónico degenerativos que los hacen vulnerables a contraer el Covid-19, es decir, no hay un mensaje que indique si van a regresar o no a las aulas, en caso de que sí en qué condiciones y medidas sanitarias. Al tiempo.

Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.