Después de que los candidatos a las alcaldías, diputaciones locales y presidencias de comunidad entraron al campo de la campaña electoral la efervescencia política en Tlaxcala llegó al tope, y es que en todos lados se habla de la contienda y sus protagonistas.

Es evidente la preocupación de las y los candidatos para conquistar la confianza de los ciudadanos, es más, en este momento hasta son capaces de subir al techo de una obra en construcción sin importar el peligro que esto represente con tal de lograr un voto, saludar al albañil y captar la foto, vaya algunos hasta comen tortas en las banquetas, otros voltean las tortillas del comal caliente y unos más hasta ayudan en la vendimia de las frutas y verduras, después de la votación estos gestos y acciones no se repiten.

El malestar y el hartazgo social hacia los políticos no tiene vuelta de hoja el señalamiento es que nunca terminan de regresar al lugar en donde buscaron el voto, ya no se les ve comiendo en la banqueta, ya no ayudan a vender frutas, echar tortillas al comal caliente o a mover la cazuela del mole porque el interés se cumplió.

Las candidatas y candidatos en este momento recorren calles, visitan viviendas, entran a negocios y saludan a personas con alguna discapacidad sin registrar y anotar las carencias, lo que les importa es lograr el voto, lo demás se verá en el camino.

La gente sabe de los pretextos y las frases que usan los candidatos que ganan para evadir su responsabilidad y hasta el saludo “Ya no hay tiempo, pero no se preocupen abriremos un espacio en la agenda para visitarlos en los próximos días”, “No me lo van a creer pero como ahora gobierno para todos no tengo tiempo, tiempo es lo que me falta”, “Será mañana, pero sepan que no los olvido, los llevo en mi mente”, “Tengo una reunión urgente pero mi auxiliar los atiende, mi oficina está abierta, recuerden que estamos para serviles”, así las cosas.   

La verdad es que la tarea de convencer a la gente no es fácil, mucho menos gobernar para todos sin privilegios, compadrazgo, amiguismo o para cumplir compromisos y presiones de sus partidos políticos.

El hartazgo general se expresa todos los días, por lo tanto, la obligación de quienes ganen la elección es buscar las estrategias para dar un giro en positivo en la forma de hacer política, cumplir sin demagogia, no mentir o crear falsas expectativas, es más, la tarea se duplica porque también deben convencer a quienes en su momento fueron adversarios.

La contienda en Tlaxcala en este momento hasta al tope, tan sólo la pelea para la gubernatura es cada vez más cerrada, en este momento no hay nada para nadie, ni para las dos aspirantes que encabezan las preferencias, es decir, Anabel Aválos y Lorena Cuéllar, pero mucho cuidado porque la abanderada del Movimiento Ciudadano Eréndira Jiménez va en subida, y esto puede cambiar el escenario y las estrategias políticas, todo puede suceder, dejemos que el tiempo acomode las cosas en su lugar. Que tal.   

ARTILLERIA PESADA…

Nos dicen que Aristeo Morales “El santanero” candidato a la presidencia municipal de Chiautempan por el partido Impacto Social Sí, no dejará cabos sueltos y entra de lleno a la contienda cobijado por un equipo que busca un cambio en esta demarcación, anotan a Roca María Solís como síndico procurador, la contienda es difícil pero no imposible de ganar.

BOMBAZOS…

El candidato a la diputación local por el VI distrito de la coalición “Juntos Haremos Historia” Lenin Calva Pérez, inicio campaña con el pie derecho, de manera inmediata se sumaron a su proyecto jóvenes, maestros, deportistas, amas de casa, personas de la tercera edad y campesinos de Ixtacuixtla, Panotla y Totolac, una de sus propuestas es retirar el fuero a políticos. Ya se verá.

Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.