El 9 de agosto no se olvidará y quedará en el registro histórico de Tlaxcala como un día en donde cientos, tal vez miles de tlaxcaltecas salieron a las calles a manifestarse en contra de las supuestas acciones “impositivas” de un gobierno que ha venido de más a menos por la falta de estrategia y tacto político para escuchar, atender y resolver en tiempo y forma las dudas de ciertos sectores de la población relacionadas con proyectos gubernamentales.

Nadie duda de las buenas intenciones de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros para generar oportunidades, desarrollo y bienestar para los tlaxcaltecas, aquí lo cuestionable y reprobable es la cerrazón y las formas erróneas para comunicar de sus planes y determinaciones.

La verdad incómoda, pero lo cierto es que el gobierno estatal no supo o no quiso vacunarse ante inminentes protestas sociales, es decir, no utilizó las estrategias de acercamiento y comunicación adecuadas para evitar los desacuerdos sociales, no fue proactivo no aplicó la frase “hablando se entiende la gente”.

Cuéllar Cisneros debe ser la mujer más informada del estado para ejecutar con seguridad y sin titubeos sus proyectos, no puede dar anuncios si desconoce de los mecanismos, protocolos, permisos o lo que dictan las leyes y sus facultades como la titular del Poder Ejecutivo.  

Con todo lo ocurre alrededor de un gobierno morenista, Cuéllar Cisneros debe recomponer el camino, aceptar sus errores y analizar con detalle el trabajo de cada uno de sus asesores, porque todo parece indicar que el origen de los problemas se encuentra en las entrañas del mismo gobierno, no hay comunicación organizacional porque cada quien quiere hacer de todo con tal de quedar bien con la “jefa”.

El intento de la Mandataria estatal para proteger sus acciones mediante reuniones y firmas de apoyo con la mayoría de los presidentes municipales del estado es bueno pero tardío para desintegrar de un día para otro una serie de viejas manifestaciones e inconformidades ciudadanas.

Ojalá que el gobierno de Lorena Cuéllar mantenga la calma y no utilice la fuerza pública para esparcir la marcha de este 9 de agosto, porque deben pensar que además de manifestantes van de por medio los periodistas que cubren la nota y personas que nada tienen que ver con estas diferencias.

Por el otro lado, los líderes de la movilización deben garantizar una marcha pacífica sin desmanes, ojalá que no permitan la filtración de gente provocadora; no deben desvirtuar el objetivo que es ser escuchados y atendidos para aclarar dudas sobre el nuevo modelo de salud para maestros y burócratas, así como del proyecto “autotren” que si bien van porque van, es necesario y sano escuchar las justificantes, pero el tiempo acomoda a todos en su lugar.

Bombazos…

Jorge Corichi se integra de lleno al equipo de Marcelo Ebrard, en busca de la candidatura presidencial de Morena,  nada más será el coordinador de los trabajos de la cuarta Circunscripción que abarca cinco estados del país, el exalcalde de la capital de Tlaxcala apuesta a ser un próximo representante en la Cámara de diputados federal. Ya se verá, mientras tanto, la bienvenida de este político a las filas ebraristas la hizo el propio Marcelo.

Artillería pesada…

Nos dicen que en el Movimiento Ciudadano de Tlaxcala no andan bien las cosas, la diferencia entre el grupo de los “Cucos” y el de los “sandros” no es nada cordial, lo cierto es que en ese instituto político esperan el arribo de personajes políticos que seguramente contribuirán a garantizar la unidad y serán factor para limar asperezas por el bien de quienes creen en la doctrina naranja, pero a propósito ¿ya sabrán algo en el PRI y en el PAN? Como la ve.

Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.