La primera visita de estado que realizará el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador a Estados Unidos en donde sostendrá reuniones con el Mandatario de ese país, Donald Trump, tiene varias aristas de interés para ambos jefes de gobierno, para uno concretar acuerdos comerciales que tanta falta hacen a nuestro país y para el otro garantizar su reelección. 

Para muchos analistas internacionales este encuentro conlleva varios riesgos, incluso de salud, por lo tanto, el Presidente de México debe ser precavido en el momento de pactar acuerdos, en virtud de que Donald Trump acostumbra a utilizar el doble discurso.

Para nadie es noticia que el Mandatario estadounidense elogie el trabajo de su homólogo mexicano y a la vez se burle de los mexicanos con mensajes racistas y agresivos.

Hace un día lo volvió hacer, primero califica a López Obrador de ser un Presidente “maravilloso” y luego sube a sus redes sociales algunas fotos paseando en el muro de la frontera que divide a Estados Unidos con México, la burla hacía al país es evidente.

López Obrador está obligado a ser más inteligente que Donald Trump, debe actuar a la altura de lo que marca una relación internacional ante la entrada del nuevo tratado comercial, toda vez que la intención del Presidente de Estados Unidos es tener un beneficio a costa de los mexicanos, los resultados de este encuentro no se pronostican alentadores.

Analistas internacionales comentan que esta reunión será sumamente cuidada y en su caso, debidamente maquillada si los resultados no son favorables a Donald Trump, las condiciones para México son de alto riesgo que incluso lo pondrán entre la espada y la pared, la primera condición ya se dio: el Mandatario mexicano y su comitiva se someterán a la prueba del Covid-19.

López Obrador debe ir perfectamente preparado para no hacer quedar en mal a México y a los mexicanos, debe actuar con diplomacia, seguridad y contundencia para lograr los acuerdos comerciales que anhela para seguir con sus planes de alcanzar la cuarta transformación.

Los titubeos que cometa durante su primera visita internacional como Presidente de México serán comprensibles, lo que no será permisible es que pacte acuerdos que pongan en riesgo la soberanía de México, como el tema del muro fronterizo, entre otros, que incluso ponen en peligro la estabilidad de los migrantes mexicanos.

La población dará el beneficio de la duda a López Obrador, en virtud de que se trata de su primera reunión de estado, luego debe considerar que es necesario que asista y participe en las convocatorias de carácter internacional, no puede ser sólo un Presidente de conferencias de prensa mañaneras y de giras por municipios del país, deber ir más allá si es que quiere el desarrollo y bienestar de los mexicanos que tanto pregona.

Lo cierto es que él y su comitiva deben blindarse de cualquier desplante antes, durante y después de esta reunión, porque uno de los dones de Donald Trump es utilizar el doble discurso.

El que de plano rechazó la invitación fue el primer Ministro de Canadá Justin Trudeau, pero sin embargo aceptó visitar México próximamente, ya se verá.

BOMBAZOS…

Ante la presencia del Covid-19 los 60 alcaldes del estado analizan la posibilidad de rendir sus próximos informes de gobierno de manera virtual, es decir, a través de la grabación de un mensaje a la población y de videos que expongan los avances de obras y beneficios, todo será a través de redes sociales. Como la ven.

ARTILLERIA PESADA…

Una vez más Marco Mena se colocó entre los mejores gobernadores a nivel nacional que han sabido manejar la situación del Covid-19, aunque aún existan personas que no creen en la presencia y propagación de este mortal virus.

Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.