Con la novedad que los actuales diputados locales continúan tomando decisiones retrógradas en el Congreso del Estado.

Resulta que ayer, como si se tratara de un tema de vital importancia, decidieron tumbar los muros del Palacio Legislativo.

La determinación de la mayoría legislativa tiene sus implicaciones, pues se afectarán las recientes obras en ese inmueble público.

Antes de concluir funciones, la anterior legislatura gastó 25 millones de pesos en la remodelación del Congreso del Estado.

Tenía años que al edificio, ubicado frente a la Plaza Juárez, no se le invertía ni un solo peso en su mantenimiento.

Además, se le quiso dar mayo seguridad y dignidad a la actividad legislativa, como se estila en el Congreso de la Unión.

Pero bastaron unas pocas voces de reporteros, que se negaron a pasar puestos de control, para que la presente legislatura diera traste a la inversión.

En los próximos días se derribarán los muros que conectan el patio vitral con los cubículos de los diputados, por lo que de nuevo imperará el desorden y la anarquía en el interior del Palacio Legislativo.

Parece que los diputados locales no dan cuenta que con esa decisión, se están dando un balazo en el pie, pues ellos eran los beneficiarios con la pasada remodelación.

Al tiempo.

victortamayo5@hotmail.com