Florecita
Sábelo bien florecita sutil, que el amor se acabó, la vida es así.
Su tragedia comenzó el 1 de junio, bueno quizá antes, cuando decidió seguirle siendo leal al rey muerto.
Ya entonces, la cabeza de Héctor Maldonado Bonilla y todos los afines al ‘marianato’ corrían riesgos al interior del Poder judicial.
No, no fue Mena quien impulsó su destitución como Presidente del Tribunal, a Maldonado lo corrieron sus excesos, el abuso de poder, la ambición.
Y es que así, sin tantita pena, buscó plazas, contratos, casos, licitaciones. ¡Muy mal hecho muchachito!
La última que sus homólogos magistrados le pasaron, fue pretender, a través del Consejo de la Judicatura quitar facultad al pleno para designar jueces y personal jurisdiccional.
Tantito peor, suponer que en un órgano colegiado las decisiones se toman de forma unilateral, craso error.
En la disputa por la presidencia del Poder Judicial, fue el voto de seis de siete magistrados quienes determinaron nombrar a Mario de Jesús Martínez Jiménez, el nuevo presidente.
Maldonado se amparó logrando rescatar algunas horas el encargo, mismo que será hasta el próximo martes cuando el juez tercero del distrito, emita un fallo definitivo al amparo.
En tanto, anoche el órgano colegiado reconoció como presidente del Poder Judicial a Martínez Jiménez,
Qué más pruebas de que a Maldonado lo quieren fuera, sea por su exorbitante salario mensual -205 mil pesos- o por su intención de seguir haciendo las cosas como se hacían ya antes.
La salida de Maldonado al frente del Poder Judicial, porque créalo, así será, solamente es una muestra de que el poder en turno va por todos los niveles de control.
Lo que sigue será la limpieza de toda ciudad judicial.
Atrás quedó la ‘idea’ del rediseño del poder judicial, también la campañita de imagen que ya le montaban al ex presidente, sus giras por el país.
Menos mal que las fichas de la reconfiguración de poder en Tlaxcala ya se mueven, para no volvernos sosos ni desesperados.
Habrá que ver por la mano de quién.
Hasta la próxima…
@Naye_Romero89
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