De las 5 decenas de nombres de autodestapados como gobernadores (as) interinos, lo cierto es que varios se han caído y muchos –la gran mayoría – ni siquiera fueron analizados con seriedad por los diputados del Congreso local, ya que nombres como Abraham Palacios, Rosa Márquez Cabrera, Olivia Carrera, Humberto Morales, etc representan poco en términos de respaldo político: http://desdepuebla.com/2019/01/12/candidato-a-gobierno-interino-pide-que-el-congreso-escuche-a-los-candidatos-ciudadanos/.

Por el momento, la disputa por el gobierno interino se centra en 3 personajes que –a decir de personajes ligados a las negociaciones – sí tienen posibilidades de ser nombrados por la Legislatura de Puebla: los ex priístas José Doger Corte y Guillermo Pacheco Pulido y la ex panista Ana Teresa Aranda, que, al parecer, se ha andado moviendo en la Ciudad de México.

La dilación en la designación del mandatario interino parece ser una estrategia del gobierno federal de AMLO para empatar la elección extraordinaria de Puebla con las de otras entidades, Aguascalientes, Durango, Tamaulipas, Quintana y Baja California, en este último también se votará por el Ejecutivo estatal.  

Además, Morena quiere que el INE atraiga los comicios extraordinarios de Puebla y; en consecuencia, éste es otro motivo de la tardanza. 

Si usted se pregunta por qué la mayoría morenista en el Congreso de Puebla se ha tardado tanto en decidir, cuando Gabriel Biestro, José Juan Espinosa, Héctor Alonso Granados y demás camada se comportó de manera especialmente rápida en autoasignarse las mejores comisiones, fijarse jugosos aguinaldos y demás, es porque la secretaria de Gobernación federal, Olga Sánchez, atiende directamente el tema: http://desdepuebla.com/2019/01/11/sigue-la-discusion-en-el-congreso-del-estado-para-elegir-gobernador-interino/.

La designación del gobernador interino poblano es clave para la estabilidad no solamente de Puebla, sino de todo el país y; por lo mismo, Andrés Manuel López Obrador y Olga Sánchez manejan el asunto: http://desdepuebla.com/2019/01/08/gobernador-interino-y-las-malditas-senales-de-los-pinos/.

Los barbosistas querían a Gabriel Biestro como interino, pero – al parecer- ya quedó fuera de la competencia. Lo mismo sucedió con Jesús Rodríguez Almeida, el actual encargado del gobierno de Puebla, que era defendido por el morenovallismo, mientras que las aspiraciones de Héctor Alonso Granados quedaron como una utopía.

Los jaloneos son fuertes en la CdMx y la fracción parlamentaria del PRI podría jugar un papel trascendente para nombrar y legitimar al próximo Ejecutivo estatal, porque tiene la posibilidad de ser el fiel de la balanza en la disputa entre morenistas y panistas. Los priístas no tienen candidato, pero han exigido que la designación sea por consenso y que Morena no aplique su mayoría mecánica: http://desdepuebla.com/2019/01/11/pri-pide-consenso-para-nombrar-al-interino/.

Los candidatos que se mantienen vivos –al menos hasta hoy, 16 de enero del 2019- son José Doger Corte, Guillermo Pacheco Pulido y el caballo negro podría ser Ana Teresa Aranda, quien no es mal vista por las filas de Morena, debido a que fue una enemiga acérrima del morenovallismo, además de que mantiene buenas relaciones con sectores del PAN tradicional.