Algo quedó demasiado claro en la reunión que sostuvieron el gobernador Marco Mena, alcaldes y funcionarios estatales, con futuros delegados federales, encabezados por Lorena Cuéllar.

Que el mandatario local demostró que la rectoría de la seguridad pública en el Estado de Tlaxcala, seguirá siendo del Ejecutivo.

Ayer, en la reunión convocada por el gobernador Marco Mena, éste hizo patente, de modo institucional, que corresponde a su gobierno coordinar los trabajos para enfrentar la inseguridad.

Se trata de un mensaje político que da certidumbre sobre el rumbo de las tareas que en la entidad se emprenderán para mantener al mínimo la incidencia delictiva.

Y ataja supuestos, en el sentido de que la rectoría de la seguridad pública, quedaría en mano de los súper delegados federales, que iniciarán funciones a partir del 1 de diciembre próximo.

Es evidente que el Gobernador echó mano de su oficio político para trabajar de la mano con los representantes de la administración que encabezará Andrés Manuel López Obrador, con la idea muy clara de refrendar en los hechos su eslogan: construir juntos.  

Ojalá los nuevos delegados federales  entiendan la importancia de trabajar en equipo, para que las estrategias que se implementen sean eficaces.

La reunión se realizó en el auditorio de la Secretaría de Desarrollo Económico, donde se dieron cita los representantes de los tres niveles de gobierno.

Ahí estaban los delegados del próximo Gobierno Federal, Lorena Cuéllar Cisneros, Baldemar Cortés Meneses, Isela Rojas Amador y Jorge Atristain San Germán.

También asistieron el General , Miguel Hurtado Ochoa, Comandante de la 23 Zona Militar; José Aarón Pérez Carro, Secretario de Gobierno; José Antonio Aquiáhuatl Sánchez, Procurador General de Justicia del Estado; Eduardo Valiente Hernández, Comisionado Estatal de Seguridad;  así como los alcaldes de los 56 municipios del estado.

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