Recibirá un reconocimiento como Embajador por la Paz  

No es Bad Bunny pero tiene 336 mil 397 oyentes mensuales en Spotify.

Su canción Romeo y Julieta, uno de sus más grandes hits ha sido reproducida más de 8 millones de veces tan solo en esta plataforma, sin contar los minutos en radiodifusoras, eventos sociales, conciertos y antros en boga desde los años 90´s.

La música de Jorge Domínguez y su Grupo Super Class, es universal, la escuchan en el transporte público y reuniones de alta sociedad, desde Nueva York hasta las rancherías más pobres de México.

‘No te imaginas dónde me oyen, lo digo con humildad’ relata Jorge en una mesa durante nuestro almuerzo y entrevista para Cuarto de Guerra.

Su historia como artista comenzó hace algunas décadas cuando adicionaba para ser la voz principal de alguna agrupación, lo consiguió hace 37 años.

‘Lo que quieras hacer en esta vida lo puedes lograr si es que tienes esa visión’.

Este 2020 trajo para Jorge bastas experiencias, desde un descanso obligado tras contagiarse de Covid-19, como los meses que ha dedicado a su recuperación en completa paz y más cercano que nunca a Dios, a quien dice, le reza a diario desde su alta médica.

¿Qué ha hecho Jorge Domínguez este año, viene un disco nuevo?

La verdad es que no, sigo cantando, pero después de lo que viví me he dedicado a orar y fortalecer mi espiritualidad’ Sostiene.

Tras superar el Covid, Jorge tiene mucho que agradecer, su familia, matrimonio, su carrera musical, el éxito sostenido y el cariño de la gente.

‘Estoy por cumplir 57 años rodeado de lo más importante, la familia, mis hijos, nietas, esposa, amigos leales y músicos de toda la vida, Super Class está por cumplir 30 años, mi éxito ha sido constante’

¿Su éxito está asociado con su felicidad?

Si, si no eres feliz no vas a hacer bien las cosas.

El interprete de éxitos como Niña Mágica, Aline, Por Ella, entre otros ha tocado con su música a tres generaciones, se dice aprendiz de los éxitos y de los fracasos como su postulación a presidente municipal de Apizaco hace casi 10 años.

‘Los partidos te utilizan hay que decirlo, no crea que nos buscan por lo bien que cantamos’ lo explica tras saludar en el mismo lugar al empresario Javier Rivera, quien se acerca a la mesa para desearle salud y feliz navidad.

¿Qué sería si no fuera cantante?

Pienso que me dedicaría a la gastronomía, he tenido mis propios restaurantes, fui carnívoro, pero ahorita ya me prohibieron las carnitas.

¿Cómo enfrentó la pandemia, su contagio?

Yo no creía en la enfermedad, pero no salía, no sé de dónde lo adquirí, mi madre tiene 95 años y no se contagió, yo me cuidaba mucho hacía ejercicio y tomo vitaminas, pero me contagié.

¿Qué deporte practica?

Yo hago mucho cardio porque por mi estatura no puedo hacer pesas y así.

• O sea, Basquetball no juega.

• ¡Qué crees, si!, ja, ja, ja.

Jorge Domínguez tiene pocos complejos, ni su origen, descendencia ni estatura le avergüenzan, viste siempre en dos tonos blanco o negro, ahora dice, su ropa le queda ajustada, pero ni eso les ahuyenta a sus más fervientes fans.

‘Algún tiempo sobre todo en los 90´s todo me quedaba hacía gym y vieras, tenía mi pegue’ cuenta entusiasmado.

Duda genuina ¿Qué hace primero, componer o musicalizar?

‘Fíjate que nadie pregunta eso, yo primero musicalizo, luego escribo la letra, ‘Mi pequeña Michelle’ por ejemplo, fue escrita para la única hija mujer que tengo y se convirtió un éxito muy famoso.

¿Qué le inspira para componer?

Algún ritmo, experiencias personales, nada más.

El cantautor de Niña Mágica, casi un himno en las fiestas, reconoce no tener excesos, pero si conocer personas que podrían arrastrarlo a ellos.

En su historial no hay escándalos por adicciones o conflictos familiares, tampoco ninguno relacionado con la delincuencia.

¿Le han invitado a cantar en fiestas de políticos reconocidos?

Si, antes y ahora, pero también a eventos de personas que tienen actividades interesantes de las que todos saben a qué se dedican.

¿Le da miedo?

Pues me contratan y llego a cantar, es todo, tocamos y nos vamos, son fiestas familiares como cualquier otra.

Para Jorge su forma de trascender está en la música y en ayudar desde su trinchera a la gente, sabe que su profesión tiene fecha de caducidad y reconoce el hecho de que, en la historia musical él y su agrupación se están convirtiendo en un clásico.

Su forma de vida, su historial familiar y sus actos le han valido ganar amistades y obtener reconocimientos, un nombramiento como Embajador de la Paz que le otorgará el próximo sábado la Universal Peace Federation, convirtiéndolo en el primer Apizaquense en obtener dicha distinción.

Luego pasará, como muchos, navidad y año nuevo en casa con su familia por la pandemia.

¿Qué le dejó esta pandemia?

La enseñanza de que la vida no va a ser igual, nosotros los músicos somos un sector muy golpeado en lo económico, sin embargo, tenemos la fe de que esto va a pasar.

¿Hizo nuevos amigos?

Si, mis ángeles terrenales, enfermeras y médicos del IMSS que me ayudaron mucho cuando estuve internado, tengo ya compromisos de cantarles el próximo día de la enfermera.

¿Cómo le gustaría trascender?

Quiero que la gente me recuerde como alguien que aportó algo a su comunidad.

Para finalizar la entrevista, un par de fotos, un mensaje en redes y el agradecimiento a sus clubes de fans.

No importa que hoy no esté en el escenario, lo extrañarán mañana… ¿O cómo era? CG.