Esta semana que concluyó, fue la de las declinaciones, no tan solo a nivel local con lo realizado por la fugaz candidata Liliana Becerril Rojas del PES a favor de la abanderada Anabel Avalos Zempoalteca, de la coalición PRI-PAN-PRD-PS-PAC.

En Sonora, Ricardo Bours de MC, hizo lo propio a favor de Ernesto Gándara abanderado de la coalición PAN-PRD; en Sinaloa Tomás Saucedo del PVEM se adhirió a favor de Rubén Rocha de Morena.

 En Michoacán, Abraham Sánchez de RSP, se sumó al candidato morenista Alfredo Ramírez Bedolla; Alejandro Díaz de FxM y María Eugenia Baeza de RSP, se aliaron a María Eugenia Campos del PAN en Chihuahua.

En tanto, en Zacatecas Bibiana Lizardo, de un partido local se adhirió a Claudia Anaya, de la coalición PAN-PRD-PRI; en ese mismo estado Fernanda Salomé Perera, de RSP, se sumó al “Candidato de las nalgaditas” David Monreal.

Si bien, las declinaciones y renuncias se dan en este contexto, a escasos trece días de la jornada electoral, todo suena lógico. Pero lo que aquí llama la atención, es que los denominados partidos satélites PES, RSP y FxM que fueron creados para jugar un papel a favor del gobierno en turno y en este caso de la 4t.

Pues parece que no es así. Algunos han declinado bajo esa lógica, pero otros no, y se han sumado a los partidos opositores; a decir del Presidente Amlo: los neoliberales o conservadores.

En lo que parecía una elección a favor de la 4t, por el alto índice de popularidad del Presidente y el hartazgo de la sociedad mexicana hacía los anteriores gobiernos. Se le vino complicando este escenario a Morena.

Estados como el de Tlaxcala, donde la abanderada de la Coalición Juntos Haremos Historia, Lorena Cuellar Cisneros de llevar casi 20 a 25% de ventaja sobre la abanderada Anabel Avalos Zempoalteca, de Unidos por Tlaxcala, hoy esa ventaja se cerró y la lectura de las diversas encuestas dadas a conocer hablan de un empate técnico.

El estado de Nuevo León puede ser estrenado por el partido naranja de MC, para hacerse la titularidad del Poder Ejecutivo con el youtuber político Samuel García; en Campeche el aspirante de MC, está haciendo la honrada frente a la morenista Laida Sansores, donde se mantiene una cerrada disputa electoral.

En Baja California, la disputa se centra en la abanderada morenista Marina del Pilar Ávila y el misógino candidato del PES Jorge Hank Rhon donde la moneda se mantiene en el aire.

En Baja California Sur, los números indican que Francisco Pelayo, de la coalición PAN-PRI-PRD, se va hacer de la titularidad del Poder Ejecutivo. El mismo escenario presenta el Estado de Querétaro, donde Mauricio Kuri del PAN, se mantiene al alza sobre sus principales contendientes políticos. En Chihuahua, María Eugenia Campos del PAN, presenta el mismo escenario y de no suceder algo extraordinario arribaría a la gubernatura de ese estado norteño.

En Colima, la morenista Indira Vizcaíno Silva, al igual que la torita Evelyn Salgado Pineda en Guerrero, parece ser que pintaran de guinda esos estados.

En Michoacán el escenario se le complicó al morenista Alfredo Ramírez Bedolla, pero aún así mantiene una ligera ventaja, en Nayarit Miguel Ángel Navarro, de Morena mantiene una ventaja cómoda.

En San Luis Potosí, todo parece indicar que el cuestionado Ricardo “El Pollo” Gallardo de la alianza PVEM y PT, se hará de la gubernatura de ese Estado. En Sinaloa el escenario luce cerrado entre el morenista Rubén Rocha Moya y el aliancista Mario Zamora Gastelum del PAN-PRI-PRD.

En Sonora, lo que parecía ser un asunto de trámite para el exsecretario de Seguridad Pública Federal Alfonso Durazo de Morena, se le ha complicado frente al aliancista Ernesto Gándara del PAN-PRI-PRD.

En Zacatecas, el candidato de las manos sueltas David Monreal, perdió la ventaja que lo daba como favorito frente a la panista Claudia Anaya Mota, donde eso de jugar con fuego en una elección puede tener sus resultados adversos. Ahora la final luce de fotografía.