La Senadora por Tlaxcala, Anabell Ávalos Zempoalteca, ha exigido al gobierno del estado una aclaración urgente sobre el uso y destino de más de 800 millones de pesos que han sido obsernvados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) desde los últimos meses del 2021 al 2023.


Está cifra que es escandalosa y ofensiva para el pueblo de Tlaxcala, ha implicado un probable daño patrimonial a la Hacienda Pública, esto a pocas semanas de que la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, presente su Tercer Informe de gobierno.

La también integrante de la fracción Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) destacó que, solo en 2023, el gobierno morenista debe aclarar más de 321 millones de pesos, cifra que se suma a los 406 millones que no pudo justificar en 2022 y a los 152 millones correspondientes a los últimos cuatro meses de 2021.

Estas cifras, apunta la legisladora tlaxcalteca, evidencian un escándalo de corrupción y falta de transparencia en la gestión de los recursos públicos e hizo énfasis en el impacto significativo de este desfalco que, bajo la administración de Cuéllar Cisneros, se han desaparecido en promedio un millón de pesos diarios de las arcas públicas.

Entre las irregularidades mencionadas por la ASF, la Senadora tlaxcalteca resaltó el pago por obras no ejecutadas, sobrecostos en contratos, pagos a aviadores y la aplicación irregular del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas; lo que calificó como un abuso de poder que debe ser sancionado, y que la gobernadora y su administración tienen la responsabilidad de rendir cuentas y corregir esta situación de manera inmediata.

Finalmente, Anabell Ávalos expresó su incredulidad ante las prácticas de un gobierno que se presenta bajo el lema de "No mentir, no robar y no traicionar al pueblo", mientras se ve envuelto en acusaciones de corrupción; por lo que hizo un llamado urgente a la gobernadora Lorena Cuéllar para que asuma su responsabilidad y de la cara a la ciudadanía, pues la falta de respuesta solo profundiza la desconfianza y la indignación de los tlaxcaltecas.