(Alexis P. González) Con dos disparos de arma de fuego en la cabeza y otras huellas violentas fue localizado el cuerpo sin vida de un hombre, en la comunidad de San Rafael Tenanyecac, perteneciente al municipio de Nativitas.

Se presume que el masculino fue violentado en otro lugar, y que le dieron dos tiros de gracia, pues en la zona había mancha hemática fresca.

El macabro descubrimiento fue reportado durante esta mañana, a través de una llamada al Servicio de Emergencias 911, alertando a las autoridades sobre la presencia de un cadáver en terrenos de labor, en el lugar conocido como la "Majoma", cerca de la Avenida Xicohténcatl, carretera que comunica a Tenanyecac con la Junta Auxiliar de Santa Ana Xalmimilulco, municipio de Huejotzingo, Puebla.

Elementos de la Policía Municipal de Nativitas, como primeros respondientes, acudieron de inmediato al sitio indicado y confirmaron la veracidad del reporte, en conjunto con paramédicos de Tepetitla.

A la valoración, pudieron constatar que se trataba de un hombre de unos 35 años años de edad, semidesnudo, con pantalón de mezclilla azul, calcetines blancos y presentaba al menos dos heridas de arma de fuego en la cabeza, sin signos vitales.

Además, informaron que tenía tatuajes, uno de estos en la parrilla costal izquierda.

Por ello, el sitio fue acordonado con cinta roja y las patrullas municipales fueron atravesadas para impedir el paso de personas, para evitar que la escena se contaminara. 

A este operativo de resguardo, acudieron elementos de la policía estatal e integrantes del ejército mexicano.

El homicidio doloso fue notificado a personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), por lo que peritos de campo, policía de investigación y el Servicio Médico Forense trabajaron en sus respectivos campos de competencia.

La identidad del occiso no ha sido confirmada y se espera que las características descritas puedan ayudar a los familiares a reconocer el cuerpo. 

Esta zona es un foco rojo de este tipo de acontecimientos donde Tlaxcala se ha convertido en un tiradero de cadáveres. 

Por la cronología de este hecho, se trataría de un posible ajuste de cuentas, entre bandas delictivas relacionadas con la venta ilegal de combustible o narcomenudeo; sin embargo, serán las autoridades las que investiguen el caso.

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