Boca floja

Boca floja

Se le fue la boca en su reciente visita a Tlaxcala a Raquel Sosa Elizaga, coordinadora de las universidades para el bienestar ‘Benito Juárez’.

Y es que resulta, en su reciente visita a Xaltocan ‘confundió’ a la prensa con personal del ayuntamiento y pues, se desbocó.

La Coordinadora, afirmó que la obra de Xaltocan donde se construye una de las dos universidades del bienestar en Tlaxcala, había excedido en 7 millones de pesos el recurso asignado, principalmente en la adquisición de materiales a sobrecosto.

También que, en la citada obra había desperdicio de material y que los 12.9 millones de pesos invertidos solo han conseguido 300 m2 de construcción.

A la coordinadora le alcanzó hasta para decir que instruiría una auditoria al gasto que se realiza en la construcción de dicho campus universitario.

Lo que no le contó a la prensa es que, aun cuando existen comités de vigilancia que supervisan los gastos de la obra, las construcciones de las universidades del bienestar no cuentan con ningún procedimiento ni guía para ejecutar el recurso.  ¡Ah caray!, ¿Qué auditará entonces?

Tampoco nos contó que de los 12.9 millones dispersados más de 9.7 se han destinado a la adquisición de materiales y poco más de 2 millones han pagado sueldos de personal y mano de obra, tampoco dijo que sus famosas universidades carecen de agua y luz.

Entre los detalles de la construcción también resalta que para ser un proyecto austero se ha solicitado enduelar los techos con cedro, aunque claro, sólo alcanza para ayacahuite y dicho gasto rebasa ya los dos millones de pesos.

Tan improvisado fue el proyecto que los responsables sugirieron conectar 100 paneles solares pero su adquisición implica invertir 1.8 millones de pesos y pagar a CFE más de medio millón por un permiso para generar energía.

Entre los detalles omitidos se encuentra el hecho de que la zona de construcción no cuenta aún con servicios, lo que implica pagar agua de pipas y transformadores de energía.

El predio es otro rollo, donde se construye fue ‘donado’ por el propio presidente municipal de Xaltocan con la pretensión de arañarle al presupuesto el pago por el mismo.

A futuro le sugerimos a Raquel Sosa que se dé una vuelta por Cuapiaxtla, donde se construye otra universidad del bienestar y donde se gasta en materiales tan baratos que con un soplido del lobo feroz el plantel se les viene abajo. ¡Éxito!

 

A colación: 

Si usted recuerda #Notiminuto mantengase atento a las redes sociales pues con todo y covid-19 les tengo una sorpresa.

 

Hasta la próxima...

@Naye_Romero89

nayelir31@gmail.com