Este domingo Tlaxcala vivió un día de fiesta democrática. La elección de nuestras y nuestros 80 consejeros estatales no fue un simple trámite, sino una renovación profunda del espíritu panista, una reafirmación de lo que somos y de lo que defendemos. Porque cuando los panistas participamos, el PAN se fortalece. Y cuando el PAN se fortalece, México tiene esperanza.

Durante mucho tiempo se dijo que Acción Nacional estaba dividido, que había perdido su fuerza y su rumbo. Pero aquí estamos: vivos, de pie y más fuertes que nunca. Con las bases movilizadas, con la militancia comprometida, con la convicción de que este partido nació para servir, no para someterse.

Hoy, puedo decirlo con orgullo: en Tlaxcala, las mujeres panistas están haciendo historia. En la elección de comités municipales, el 70% de los triunfos fueron para mujeres. ¡Sí, compañeras, 70%! Que se escuche fuerte, porque esto no es una cifra: es el reflejo de un cambio profundo, de un liderazgo valiente y de una nueva generación que decidió no quedarse callada, sino liderar, construir y ganar.

Ellas son el rostro del nuevo PAN: el de la convicción, el de la fuerza, el de la esperanza. Un panismo que no se rinde, que se reinventa y que demuestra con hechos que la política se puede ejercer con decencia, con cercanía y con humanismo.

México se encuentra hoy en una encrucijada. De un lado están quienes ondean la bandera del sometimiento, de la miseria y del miedo; los que han traicionado a la patria negociando con el crimen, destruyendo las instituciones y socavando la ley.

Y del otro lado está nuestra visión: la del PAN —libre, moderno y patriota—, que cree en el Estado de Derecho, en la libertad de las personas, en la propiedad privada, en el trabajo digno y en un México que respeta la ley, no que la negocia.

Ese es el PAN que hoy Tlaxcala y México necesitan: un partido con valores, con carácter y con una militancia que sabe que la libertad y la dignidad no se imploran, se conquistan.

Durante años hemos enfrentado la adversidad. A veces, no hemos logrado consolidar nuestras estructuras, pero nunca hemos perdido la convicción. Esa convicción es la que hoy nos trajo hasta aquí.

Porque este gobierno ya decepcionó. Su discurso se desmorona, sus promesas se diluyen, y la gente está buscando una alternativa real, honesta y confiable. Esa alternativa es Acción Nacional.

Por eso debemos volver a creer, volver a sentir orgullo de ser panistas, volver a levantar la bandera azul con fuerza, con alegría y con la mirada puesta en la victoria.

Ser panista no es una moda, es una convicción profunda. La lealtad no se improvisa: se demuestra con hechos, con trabajo, con coherencia. Y las y los panistas tlaxcaltecas lo han demostrado una y otra vez.

Somos panistas de acción, no de ocasión: Los que damos la cara cuando otros se esconden. Los que defendemos principios cuando otros negocian candidaturas con intereses personales. Los que creemos que la política sí puede ser decente, cercana y humana.

El nuevo Consejo Estatal tiene una gran misión: ser los guardianes de nuestros valores, los promotores de la unidad y los constructores de la victoria del 2027.

Porque Tlaxcala lo merece, porque México lo necesita y porque el futuro depende de que Acción Nacional vuelva a encabezar el rumbo del país.

El 2027 exigirá de nosotros unidad, valor y visión. Nos pedirá pensar en grande, actuar con valentía y construir juntos el triunfo. Y lo vamos a lograr. Porque el PAN de Tlaxcala ya despertó. Porque tenemos estructura, convicción y corazón.

Cuando el PAN se une, cuando el PAN cree en sí mismo, ¡el PAN gana! Esa es la lección que nos deja esta asamblea.

Recordemos a nuestros antepasados tlaxcaltecas, que hace 500 años supieron ser más inteligentes, más estratégicos y más valientes que sus adversarios. Hoy nos toca estar a su altura: ser los nuevos guerreros del bien común, los defensores de la verdad y los guardianes de la libertad.

El camino no será fácil, púes enfrente tendremos el dispendio en programas en aquellos que se aferran a no dejar el poder, pese a su falta de resultados y sus gobiernos decepcionantes.

Felicito a los 40 hombres y 40 mujeres que resultaron ganadores para el Consejo Estatal para el periodo 2025–2028, así como de los cuatro consejeros nacionales electos que son: Alfredo Escamilla Ricalday, Cecilia Salas Zapata, Carlos Raúl Quiroz Durán y Ma. Lized Hernández Prado.

En sus manos está el destino de nuestro partido, y se que juntos iremos a las calles a conquistar corazones, nuevos liderazgos, recuperando la confianza ciudadana no con discursos vacíos, sino con hechos, con cercanía y con trabajo territorial a lo largo y ancho de Tlaxcala.

Ángelo Gutiérrez Hernández.

Presidente Estatal del PAN Tlaxcala.